Di Zeo, hasta las manos: la Justicia le intervino el celular, creen que violó su libertad en conjunto con el rey de la efedrina y ahora podría volver a prisión.
El 10 de mayo de este año, tras pasar 1.112 días en prisión, Rafael Di Zeo recobró su libertad. En la modalidad condicional, ya que su pena por haber agredido a los hinchas de Chacarita en la emboscada del 3/3/99 recién se cumple el 29/7/11. Pero la alegría de estar de nuevo en la calle podría vencérsele pronto: el miércoles será indagado en una nueva causa por la supuesta comisión de dos delitos realizados mientras gozaba de salidas transitorias (cobrar para ejercer influencia en jueces y estafa con pretexto de ejercer influencia), por lo que debería volver a la cárcel a cumplir lo que resta de su condena.
Su situación se complicó cuando llegaron al juzgado federal 2 las escuchas que se realizaron a su celular, al de Mario Segovia, rey de la efedrina, preso en Ezeiza en el mismo pabellón que Di Zeo y el de la mujer de Segovia. Es que había sospechas de que Di Zeo había estado en Rosario buscando un dinero que debía entregarle al abogado de ambos, Mariano Cúneo Libarona, y que serviría para tocar jueces en las causas en que Segovia estaba procesado. Y más allá de que pueda probarse esto último, lo que sí quedó corroborado es que Rafa, junto a dos barras de Boca, estuvieron en Rosario retirando plata de la casa de Segovia. Cuando Di Zeo hizo esto, su régimen de libertad transitoria sólo le permitía moverse de 7 a 17 en Capital Federal para trabajar y volver a dormir a prisión, por lo que al violar la pauta de conducta debería volver a la cárcel, salvo que tenga una carta marcada para jugar el miércoles ante el juez Martínez De Giorgi.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
La idea central que tuvimos al crear este blog, fue brindar un espacio para que todos los que pensamos que la violencia en el fútbol es un mal propio de una sociedad enferma, podamos vertir aquí nuestras opiniones, comentarios, con total libertad intelectual, obviamente. No se admitirá insulto ni comentarios que contenerlos implícitamente. Aprovechemos para intercambiar ideas, propuestas, denuncias si fuera el caso. No les dejemos a estos delincuentes que sigan avanzando, nunca y menos en estos tiempos que gozan de la impunidad que les brinda el Gobierno y los dirigentes de fútbol, con Julio Grondona a la cabeza.