jueves 15 de abril de 2010
19:44
Policiales
"El Hache" en libertad, y el titular del Coprosede seguirá procesado
No quedaron pruebas ni testigos contra el ex jefe de la barrabrava pincha. Los tres hinchas que lo acusaron fueron imputados por falso testimonio. Y el comisario mayor Rubén Pérez que no envió al Cuerpo de Infantería a la estación de trenes recibió otro revés judicial
"Ahora voy a rehacer mi vida, todo esto fue una injusticia”, dijo ayer Omar “El Hache” Alonso, ex jefe de la barrabrava de Estudiantes al ser liberado por falta de mérito en la causa que investiga el trágico enfrentamiento entre hinchas del pasado 3 de marzo en la estación de trenes, en el que murió un policía y otras dos personas resultaron heridas de gravedad.
La libertad, tal como anticipó Trama Urbana, fue dispuesta por el fiscal Marcelo Romero, que en la misma resolución judicial pidió la prisión preventiva de Esteban Mauricio Gallardo y Raúl Eduardo Gómez por el crimen del sargento de la Policía Federal Sergio Rodríguez, ocurrido durante la balacera en la estación de 1 y 44.
En tanto, el juez de Garantías Fernando Mateos dictó la prisión preventiva, pedida también por Romero, para los barras Iván Tovar y Raúl Cristian Pérez, por haber disparado a matar -horas después de los incidentes en la estación-, Gabriel Mastrovito, otro de los que pugnan por el liderazgo en la hinchada albirroja.
El juez Mateos, además, rechazó el pedido de sobreseimiento solicitado por el comisario Rubén Pérez, titular del Coprosede (Comité Provincial de Seguridad en el Deporte), imputado por incumplimiento de los deberes de funcionario público, al no haber enviado al Cuerpo de Infantería, tanto para prevenir como para repeler el enfrentamiento de 1 y 44 (ver recuadro).
Sin pruebas
Hubo dos actos procesales claves que determinaron la libertad de “El Hache”. Primero, fue su propia declaración, regada de testigos que podían acreditar dónde y a que hora estuvo antes y durante los incidentes en la estación.
Todas esas personas declararon en el expediente y corrobaron su testimonio, probando que tomó mate junto a su suegro, su novia y una vecina, fue a buscar al hijo de su novia a la escuela, lo llevó a un ciber y, al regresar, recién ahí, pasó por la estación.
El segundo pasaje decisivo fue el haberse enfrentado con los tres testigos que lo sindicaban como una de las personas que habían disparado a mansalva desde un Corsa color bordó.
Uno a uno, los testigos fueron incurriendo en dudas y contradicciones. El primero se retractó y los otros dos dieron cuenta de tantas inconsistencias que el fiscal terminó descartando sus testimonios como prueba de cargo.
Contra “El Hache” no quedó nada de prueba, más que su presencia “circunstancial” tras el tiroteo, en la que su anterior facción en la hinchada se enfrentaba a otra: Los Leales contra Los del Túnel.
El fiscal Romero dispuso además que los tres testigos quedaran imputados por falso testimonio
calificado.
Los coimputados Gallardo y Gómez, también de la barrabrava, y “marcados” por otros testigos como dos de los cuatro ocupantes del Corsa bordó, seguirán procesados por “homicidio cuádruplemente calificado”.
Los incidentes en los que murió el policía ocurrieron el 3 de marzo, cuando un grupo de barras de Estudiantes agredió a otro en la estación de trenes, donde habían concurrido para viajar a Quilmes a ver el partido en el que terminó perdiendo el Pincha 1 a 0 con Argentinos Juniors.
Imputación
El fiscal dispuso cuatro calificantes para el homicidio
El fiscal Romero le imputó a Gallardo y a Gómez, como agravante del homicidio, haberlo cometido con el concurso premeditado de dos o más personas, haber creado un peligro común, por la condición de miembro de una fuerza de seguridad de la víctima, y por haberlo cometido para facilitar la comisión de otros delitos.
El juez Mateos y el fiscal Jorge Paolini denegaron el pedido de sobreseimiento solicitado por la defensa del titular del Coprosede, Rubén Pérez, por “prematuro”.
Pérez también está imputado por falsear un acta por la agresión de Sergio “El Uruguayo” Chans.
Gallardo, Gómez y el Corsa bordó
En la estación de trenes, los grupos se enfrentaron a balazos. En el tiroteo, el policía federal recibió un disparo en la cabeza que le provocó la muerte. Otros dos hombres sufrieron heridas en sus piernas.
En la causa están detenidos Gallardo, apresado minutos después del hecho en las inmediaciones de la estación, y está sindicado como uno de los ocupantes del Corsa del que bajaron dos hombres y comenzaron a disparar contra el grupo de hinchas.
En tanto, Gómez fue detenido ese mismo día pero por la noche cuando circulaba por Melchor Romero con el Corsa que utilizaron los agresores.
